Una vida soñada

Estreno en Cines: 13 de Febrero de 2025.

Gentileza: Cinépolis Argentina.

Por Cecilia Tedesco.

Nicole tiene 52 años, vive en una vivienda pública en los suburbios de París junto a su hijo Serge, de 19 años, que ya no la soporta. Nicole está endeudada y desempleada, el banco le cancela la tarjeta de crédito, y comienza a sentir los signos del envejecimiento en su rostro. 

En la noche de Navidad Nicole intenta pasar un buen momento con su hijo, pero un error suyo desencadena el conflicto y la posterior ruptura en la relación madre-hijo, quedándose sola, deprimida, y sin rumbo. Al cruzarse con Norah, quien maneja su propio bar frente al edificio donde vive Nicole, surge una amistad entre ambas mujeres que resulta ser mas profunda de lo esperado.

Una historia sencilla en cuanto a la puesta y el estilo austero de la producción, pero compleja a la vez por la temática que trata acerca de las relaciones familiares, con sus conflictos profundos, y sus momentos felices si los hay. 

En este caso, la madre y el hijo tienen problemas no resueltos desde hace tiempo, hay exigencias, decepciones, y mucho para sanar. El hijo se siente asfixiado y triste por las actitudes de su madre, y busca consuelo y felicidad fuera del hogar. La madre no logra encontrar el orden ni la estabilidad en su vida, no sabe quien es realmente ni que quiere; al llegar a su mundo otra mujer, encuentra aquello que le faltaba, dandole la posibilidad de reencauzar su vida. 

Lo mejor del film es la buena química que hay entre Valeria Bruni Tedeschi y Lubna Azabal. La primera parte de la película resulta un poco sosa, pero se re significa en la ultima media hora, con una conclusión esperanzadora.

Elenco: Valeria Bruni Tedeschi (Nicole), Félix Lefebvre (Serge), Lubna Azabal (Norah), Dylan Benha-Guedj (Amine), Gédéon Ekay (Yacouba), Tya Deslauriers (Samira).

Guion y dirección: Morgan Simon.

Fotografía: Sylvain Verdet.

Música: David Chalmin.

Título original: Une vie rêvée.

2024 - Francia / Bélgica.

Drama - 97 minutos.

Notas del Director Morgan Simon:

“A medida que crecemos, vemos a nuestros padres de manera diferente. Me di cuenta del pasado de mi madre y quise cuestionar lo que ella había vivido. Tenía un significado íntimo, por supuesto, pero también era un enfoque que parecía relevante para cuestionar nuestra sociedad en un sentido más amplio. Creo que mi objetivo final también era hacer a mi madre inmortal... Apareció en uno de mis cortometrajes, “Wake the Dead”, como un fantasma. Era la historia de dos hermanos que hacen reaparecer a su madre desaparecida gracias a una poción mágica que encontraron en Internet. Ya tenía esa necesidad, ese deseo de fijar esta figura para siempre.

 

En cuanto a "Una vida soñada", la película tiene un aspecto de cuento. Hay algo caprichoso, soñador y torpe en el personaje de Nicole que me gustó explorar, un poco como en una comedia italiana. Me encantan esos personajes que son perdedores un tanto excéntricos y que terminan convirtiéndose en héroes, guiados por la luz y el destino. Veo a Nicole como una flor que está casi marchita, pero que luego comienza a florecer de nuevo y finalmente encuentra su lugar. Fue bastante emotivo verlo durante el rodaje. Recuerdo que, durante la escena de baile con la música de Dalida entre Norah y Nicole, me conmoví por Nicole; pensé que era realmente hermoso lo que le estaba ocurriendo, verla abrirse de nuevo a los demás, como los pétalos de una flor tocados de nuevo por el sol. Sentí la metamorfosis durante el propio rodaje.

"Una vida soñada" tiene lugar durante la temporada festiva, y hay un poco de la magia de las películas navideñas, algo que me encanta. Esto le da a la película un aire de cuento social que también transmite la idea de una revancha contra la vida".