Estreno en Cines: 4 de Enero de 2024.
Por Cecilia Tedesco.
“Donde hay un desafortunado, Dios envía un perro.”
Douglas es un joven que de niño fue abandonado por su madre, fue víctima del bullying de su hermano mayor, y maltratado por su padre, quien lo encerró en una jaula con perros, y desde entonces los canes han sido sus aliados incondicionales.
Douglas creció buscando su libertad, y al convertirse en adulto decide hacer justicia como un vigilante del barrio, ayudado por un ejército de perros que cumplen sus órdenes y lo protegen.
Una noche Douglas es apresado por la policia, y le asignan a Evelyn como psiquiatra para se ocupe de el. A partir de ese momento, mediante varios flashback, se va develando la dramática historia de Douglas.
Un relato profundo, triste, y conmovedor, que habla del maltrato infantil, del abandono, del bullying, de la soledad, del sufrimiento, de la falta de amor y de contención familiar en la niñez, de la violencia en el hogar, de la lealtad, del amor incondicional, y de sanar el dolor interior para poder seguir adelante.
La película se sostiene solo con la impresionante e intensa actuación de Caleb Landry Jones en el rol de Douglas, y con la presencia de los perros, cuyo trabajo también es digno de destacar. El personaje de Douglas genera empatía genuina en el espectador, y lo mantiene atento a lo que ocurre en la pantalla hasta el final.
Este film de Luc Besson se sale por completo del estilo de sus últimos trabajos cinematográficos, bajando un cambio para contar una historia mas chiquita y humana, con un personaje sensible como protagonista.
Elenco: Caleb Landry Jones, Jojo T. Gibbs, Christopher Denham, Clemens Schick, John Charles Aguilar, Grace Palma.
Guion y Dirección: Luc Besson.
Fotografía: Colin Wandersman.
Edición: Julien Rey.
Musica: Eric Serra.
2023 - Francia.
Drama - 113 minutos - SAM 16.
Distribución: Diamond Films.
Trailer:
Palabras del director Luc Besson:
“La inspiración para esta película provino, en parte, de un artículo que leí sobre una familia francesa que metió a su propio hijo en una jaula cuando tenía cinco años. De ahí surgió el interrogante de cómo algo así afecta mentalmente a una persona. ¿Cómo se sobrevive y qué se hace con el sufrimiento? Con Dogman, quise explorar esa idea.
El sufrimiento es algo que todos tenemos en común, y el único antídoto para eso es el amor. La sociedad no te ayudará, pero el amor puede ayudarte a sanar. El amor de la comunidad de perros que Dogman ha construido es el sanador y el catalizador.
Dogman no sería la película que es sin Caleb Landry Jones. El complejo personaje requería una persona que pudiera encarnar los desafíos, la tristeza, el deseo, la fortaleza y la complejidad.
La gente ve películas para descubrir algo de realidad en la historia, a pesar de ser consciente de que se trata de ficción. Con esta película, quería ser lo más honesto posible. Quiero que la gente empatice con el protagonista, las acciones que lleva a cabo y las que realiza en respuesta al sufrimiento que ha experimentado. Quiero que la gente esté de su lado.
Espero que la audiencia pueda determinar en su propia mente por lo que Dogman pasó, el dolor que es muy difícil de soportar. Ha sufrido más de lo que la mayoría de la gente sufrirá jamás y aun así conserva la dignidad.”
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